Tras 44 días de cese de actividades, los 142 trabajadores de DPA-NESTLÉ de la fábrica de Valledupar llegaron a un acuerdo que permitió el levantamiento de la huelga que adelantaban desde el pasado 16 de febrero.
El acuerdo se logró sobre la base de los puntos del pliego de peticiones que las tres organizaciones sindicales de esta multinacional lechera: Sinaltrainbec, Utradpa y Sintradpa, filiales todas de la CUT, presentaron desde el 17 de diciembre, y que tienen que ver con aumento salarial, mejoramiento de la cobertura de salud, subsidios de educación, eliminación de los intereses de los créditos para vivienda que proporciona la empresa, garantías de estabilidad laboral y no represalias hacia los trabajadores que participaron en la huelga.
DPA-NESTLÉ es una de las plantas industriales más grandes de Valledupar, procesadora de leche en polvo, quesos, milo, entre otros productos para el consumo nacional y la exportación a los países vecinos. Y también ostenta una alta rentabilidad: el año pasado registró utilidad neta de $29.607 millones, suma que contrasta con los bajos salarios que paga a sus trabajadores, toda vez que el 45% de ellos está en el nivel uno de escala salarial, ganándose un básico un poco superior al salario mínimo.
En el comunicado conjunto que da cuenta del arreglo y el levantamiento de la huelga, los tres sindicatos de DPA-NESTLÉ afirmaron lo siguiente:
“Este fue un periodo que definitivamente sirvió para demostrar ante la patronal y el estado inconsciente, la verdadera unión de la clase obrera colombiana e internacional, reflejada ampliamente en sus repetidas y voluntariosas colaboraciones, tanto morales como económicas. Además este fue un escenario que sirvió para unir más a los trabajadores de base al interior de la DPA. Pero por sobre todo, sirvió fundamentalmente para unir más a todas nuestras familias en un solo frente de lucha y de conciencia social, frente a los atropellos de esta multinacional”.
El acuerdo se logró sobre la base de los puntos del pliego de peticiones que las tres organizaciones sindicales de esta multinacional lechera: Sinaltrainbec, Utradpa y Sintradpa, filiales todas de la CUT, presentaron desde el 17 de diciembre, y que tienen que ver con aumento salarial, mejoramiento de la cobertura de salud, subsidios de educación, eliminación de los intereses de los créditos para vivienda que proporciona la empresa, garantías de estabilidad laboral y no represalias hacia los trabajadores que participaron en la huelga.
DPA-NESTLÉ es una de las plantas industriales más grandes de Valledupar, procesadora de leche en polvo, quesos, milo, entre otros productos para el consumo nacional y la exportación a los países vecinos. Y también ostenta una alta rentabilidad: el año pasado registró utilidad neta de $29.607 millones, suma que contrasta con los bajos salarios que paga a sus trabajadores, toda vez que el 45% de ellos está en el nivel uno de escala salarial, ganándose un básico un poco superior al salario mínimo.
En el comunicado conjunto que da cuenta del arreglo y el levantamiento de la huelga, los tres sindicatos de DPA-NESTLÉ afirmaron lo siguiente:
“Este fue un periodo que definitivamente sirvió para demostrar ante la patronal y el estado inconsciente, la verdadera unión de la clase obrera colombiana e internacional, reflejada ampliamente en sus repetidas y voluntariosas colaboraciones, tanto morales como económicas. Además este fue un escenario que sirvió para unir más a los trabajadores de base al interior de la DPA. Pero por sobre todo, sirvió fundamentalmente para unir más a todas nuestras familias en un solo frente de lucha y de conciencia social, frente a los atropellos de esta multinacional”.
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